Encauzamiento del urumea olvida las bicis

A finales del pasado diciembre la Agencia Vasca del Agua (URA) y el Ayto de Donostia-San Sebastián presentaron el proyecto de encauzamiento del Urumea y la nueva ordenación del barrio de Martutene. La Asociación de Ciclistas Urbanos/as KALAPIE, consciente de la necesidad de buscar una solución al grave problema de las inundaciones quiere, sin embargo, exigir públicamente que no se deje a un lado el cumplimiento de los requerimientos de un modelo de movilidad menos contaminante que todos queremos para nuestra ciudad.

Por ello queremos manifestar que:

1- En el proyecto presentado por URA y el Ayuntamiento no existe ningún bidegorri en las márgenes del río y que el recorrido peatonal es muy limitado. En este tramo se ha olvidado por completo que el Urumea es un eje natural vertebrador de los desplazamientos peatonales y ciclistas, cuando en el resto de la ciudad es una realidad ya asumida.

2- El encauzamiento supone una ruptura con la continuidad de los recorridos ciclistas existentes y proyectados junto al río. De hecho, al mismo tiempo que el Ayuntamiento está elaborando un proyecto de bidegorri por la margen izquierda del Urumea en la zona de Txomin Enea, se realiza esta propuesta que no podrá conectarse con él.

3- En el contexto de Capitalidad Cultural de Donostia 2016 es inconcebible que las márgenes del Urumea queden tan lejos de los ejemplos de las ciudades europeas donde los ríos son ejes sobre los que se apoyan los recorridos urbanos e interurbanos.

4- En el proyecto de ordenación del Ayuntamiento el trazado de viales, bidegorris y aceras responden a una lógica de prioridad de tráfico motorizado. En un momento en el que la Autovía del Urumea absorbe el tráfico de la antigua carretera Donostia-Hernani, en el barrio de Martutene se debería replantear el diseño de la antigua carretera y de la nueva ordenación presentada, donde las rotondas, la duplicidad de viales y las dimensiones de éstos apuntan a un futuro en que se seguirá favoreciendo al coche en lugar de a ciclistas y peatones.

5- Teniendo en cuenta la envergadura de las actuaciones previstas para el barrio de Martutene, en el que la transformación del río y de su entorno va a ser substancial, consideramos que atender a las cuestiones señaladas son mínimos irrenunciables si queremos avanzar hacia un modelo de movilidad sostenible.

6- Es desalentador que hoy en día, con toda la experiencia acumulada en esta ciudad en materia de movilidad ciclista y peatonal, todavía se releguen estos aspectos cuando se llevan a cabo grandes obras de infraestructuras.