La Asociación de Ciclistas Urbanos KALAPIE apoya el recurso presentado contra el proyecto de San Bartolomé

Asociaciones de vecinos y comerciantes del centro de la ciudad han puesto un recurso ante el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco en contra del proyecto del plan especial de San Bartolomé (Admiten a trámite el recurso presentado ante el proyecto de San Bartolomé). Desde Kalapie nos gustaría declarar que estamos totalmente a favor del recurso y que nos sumamos a la posición de estas asociaciones. Como ya declaramos a principios de 2021 (Nuevo parking de rotación en el centro, ¡No por favor!), consideramos que se trata de un proyecto que tendrá un impacto muy negativo en el conjunto de la ciudad, agravando aún más el tráfico del centro y que va claramente en contra del modelo de ciudad sostenible que todos los políticos dicen defender.

Como asociación que fomenta una movilidad más activa, saludable y segura en nuestra ciudad, nuestra principal preocupación es la construcción de 200 plazas en rotación que atenta contra lo que desde Kalapie procuramos fomentar. Llevamos años, incluso décadas, señalando el problema indirecto que las plazas de rotación generan en el tráfico de la ciudad. Estos parkings atraen a un gran número de coches al centro de la ciudad, generando los efectos negativos bien conocidos a día de hoy por todos (Atascos, ruidos, contaminación atmosférica, cambio climático, ocupación del espacio, etc.). Conscientes de este efecto imán que generan, muchas ciudades ya han optado por suprimir plazas de aparcamiento. Es claro, por ejemplo, el caso de Oslo del que ya hablamos anteriormente (“Oslo la ciudad sin parking”) que ha transformado totalmente la ciudad simplemente eliminando las plazas de aparcamiento. 

Y aunque aquí, nuestros políticos siempre hablan de fomentar la movilidad sostenible, sacar los coches del centro y reducir su uso, la realidad es que se sigue apostando por construir más infraestructura para el vehículo privado y en consecuencia de fomentar el uso del coche sobre otras formas de transporte más sostenibles. Cabe recordar que contamos con un centro ya saturado de parkings subterráneos que no da más de sí. Y este proyecto viene a agravar aún más la situación actual. Mientras tanto queda aún mucho por hacer en materia ciclista o en la mejora del transporte público. Faltan alternativas para incentivar que los ciudadanos accedan a la ciudad de una manera más sostenible. 

Debemos de recordar también la situación de emergencia climática que cada día es más grave y hace que sea urgente tomar medidas para reducir el cambio climático. Además, este nuevo parking al fomentar el uso del vehículo privado, va en contra de la ley de cambio climático que el ayuntamiento ya está incumpliendo y que obliga a implantar zonas de bajas emisiones en municipios de más de 50.000 habitantes y tomar medidas complementarias que reduzcan el tráfico. Ante estos hechos, tenemos claro que el gobierno de la ciudad no se está tomando en serio el reto climático y nos preocupa la disonancia tan grande que existe entre las palabras y los hechos. Entre el marketing verde que las instituciones difunden y la realidad de las actuaciones que desarrollan.

El ayuntamiento alega que tiene las manos atadas porque esta actuación fue aprobada hace 10 años y ahora ya no queda más remedio que seguir adelante. De lo contrario, presuntamente, habría que pagar una indemnización a la empresa propietaria. ¿Y si la pagamos? ¿Acaso es tan descabellado romper o renegociar el contrato? ¿No es más descabellado seguir adelante a sabiendas de que el proyecto perjudica gravemente la ciudad? Ante todo y por pura transparencia, los ciudadanos deberíamos tener derecho a saber qué es exactamente lo que se prometió a dicha empresa. Y en cualquier caso, renegociar el contrato para que el proyecto no se ejecute o se ejecute en otra parcela o que sea más pequeño o que el parking sea para residentes, son opciones que se deberían estar barajando en lugar de tirar la toalla y decir que no se puede hacer nada. Con voluntad política todo se puede. 

Además del daño que puede causar a la ciudad la construcción de un nuevo parking, nos preocupa mucho la transformación de la calle Easo que ya hoy en día se encuentra saturada, como señalamos vía twitter recientemente, y no tiene capacidad de absorber más tráfico.

Situación de la calle Easo hoy a la mañana (sabado 29 de abril). Los parkings atraen un gran número de coches al centro de nuestra ciudad. La situación irá a peor con la construcción del nuevo parking que el ayuntamiento prevé construir en San Bartolomé. pic.twitter.com/1UtTX9E0Xq

— Kalapie H.T.E. (@kalapiedonostia) April 29, 2023

El propio departamento de movilidad del ayuntamiento, ya advirtió en un informe en el que se estudiaba el impacto del nuevo parking que este proyecto tendría un impacto negativo en el tráfico de la calle Easo, donde además la bici y el transporte público serían los claros perjudicados. Kalapie ha podido tener acceso a dicho informe desfavorable gracias a la asociación de vecinos Erdian biziz, donde hemos podido comprobar que para poder colocar una rampa de acceso al parking, el bidegorri tendría que cambiar de lado en esa zona y hacer un rodeo mientras que el carril bus desaparecería por completo. Este modelo de ciudad donde el vehículo privado gana espacio a costa de bidegorris y carriles bus, no es el modelo de ciudad que desde Kalapie queremos fomentar.

Por todo lo expuesto, además de apoyar el recurso, independentiemente de lo que pueda decidir el juez, queremos hacer también un llamamiento al gobierno (actual y futuro) para que tome cartas en el asunto y busque la manera de frenar este proyecto que genera un gran rechazo al conjunto de la ciudadanía. Somos conscientes de la complejidad del problema, pero pensamos que con voluntad política es posible frenar el proyecto.